24/1/10

A FELICIDADE II


K. Ruane
....Cuando tras dar mil vueltas a mis preocupaciones,
me acuerdo de un amigo, voy a verle, me dice:
"Estaba justamente pensando en ir a verte.
" Y hablamos largamente, no de mis sinsabores,
pues él, aunque quisiera, no podría ayudarme,
sino de cómo van las cosas en Jordania,
de un libro de Neruda, de su sastre, del viento,
y al marcharme me siento consolado y tranquilo,
¿no es la felicidad lo que me vence?
........
G. Celaya

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Los sinsabores compartidos pierden con frecuencia su prefijo y se convierten en sabores comunes a los seres que nos escuchan. Hablar de lo que nos rodea es de sabios, más compartir nuestros sentimientos y problemas abre las puertas de nuestros sentimientos con la llave de la confianza.
La felicidad es un término tan variable y huidizo que pasa del todo a la nada sin apenas darnos cuenta.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con lo que ha expresado la persona que ha puesto su comentario. Yo si que creo que hablar de lo que te preocupa con alguien ayuda. Porque lo contrario, tener problemas y no tener a quien comentarlos, se aleja mucho del concepto de felicidad (al menos del mio). Aunque a veces, esa es la realidad que toca vivir.

Calle-Rua

Anónimo dijo...

Calle-Rua, la realidad que nos toca vivir puede modificarse con un poco de empeño por nuestra parte. Muchas veces, el trajín de la vida que llevamos nos impide mirar a nuestro alrededor con tranquilidad. Al hacerlo, podemos encontrar personas con las que intercambiar nuestros miedos, inseguridades y dudas puede ser posible. La realidad que nos circunda es sorprendente. ¡Hay tanta gente que no conocemos apenas y que percibe nuestras inquietudese incluso le preocupan! Basta con comunicarse mirando alrededor y dejando de lado la desconfianza.
¡Se puede!

marina dijo...

Pasa por mi blog que te he dejado un regalito :)
un saludo